Los colorantes naturales juegan un papel fundamental en la preferencia de los consumidores de alimentos y bebidas, puesto que el color es el factor de influencia más poderoso al momento de elegir un producto. Al mismo tiempo, los consumidores desean cada vez más que el color de los alimentos y bebidas provenga de fuentes naturales en lugar de los artificiales, en especial por las controversias que han tenido en los últimos años.
Es por ello por lo que la mayoría de las empresas están comenzando a optar por el uso de los aditivos naturales para darle color a sus alimentos. Sin embargo, muchas empresas aún no hacen el cambio y continúan con el uso de colorantes artificiales, puesto que se dejan guiar por los mitos que hay detrás de estos aditivos, es por ello por lo que, a continuación, les mencionaremos los principales.
El primer mito dice que tienen que sacrificar la intensidad de color al usar aditivos de color natural. Si bien, esto no es de todo falso, es una sobreestimación, la realidad es que, para la mayoría de las aplicaciones alimenticias, en la actualidad pueden lograr tonos muy brillantes y vívidos en la mayoría de los colores.
La fuente de esta percepción son los ejemplos frecuentes de productos alimenticios en Europa que carecen de los mismos colores vivos que son la norma en América del Norte y del Sur. En primer lugar, tengan en cuenta que los fabricantes europeos de alimentos comenzaron la transición a los colores de fuentes naturales hace varios años, antes de algunos de los avances en la tecnología del color natural; en segundo lugar, los productos europeos por lo regular usan colorantes de alimentos que tienden a proporcionar menos intensidad por su origen.
El segundo mito dice que tienen que esperar una variabilidad en la sombra de color, es decir, que no siempre se obtendrá el mismo color. No hay ninguna razón para que los fabricantes de alimentos se preocupen por que existan variaciones de color cuando utilizan aditivos naturales. Puesto que, en la actualidad estos aditivos se fabrican mediante un proceso estandarizado y las medidas de control de calidad garantizan la consistencia.
Por esta razón, los colores que se obtienen en la actualidad en los alimentos que usan aditivos naturales siempre tendrán la misma intensidad y no variarán de una producción a otra, que es lo mismo que sucede con los colorantes artificiales, con la única diferencia que estos últimos permiten una mayor paleta de colores.
El tercer mito dice que los colorantes de origen natural dejan sabores extraños en los alimentos. Originalmente esto no se trataba de un mito, puesto que inicialmente los aditivos naturales sí daban sabores extraños a los productos, de acuerdo con su origen, por ejemplo, cuando se producían de cáscaras o raíces. Sin embargo, en la actualidad en esta área se han logrado avances significativos.
Es preciso que muchas fuentes de color natural tengan el potencial de impartir notas de sabor en ciertas aplicaciones. Sin embargo, las nuevas tecnologías de filtración y purificación pueden eliminar sabores no deseados de las fuentes de color botánico. Además, las soluciones de color natural se pueden personalizar para alcanzar los objetivos de color sin impartir ningún sabor en los alimentos. Generalmente, cuando se trabaja con colorantes naturales, hay más complejidad durante la aplicación, pero casi siempre hay una solución disponible, por lo que es fundamental que se asesoren con un especialista para tener una adecuada aplicación de los aditivos de color.
El cuarto mito dice que los colorantes de origen natural son menos estables. Esta percepción es bastante común, pero no es muy precisa. Por ejemplo, en los últimos estudios realizados por empresas especializadas han establecido la estabilidad a largo plazo en chocolates crudos, los aditivos naturales en realidad resistieron mejor que sus homólogos sintéticos.
Así como han resultado más estables, pues es mayor a las de los aditivos artificiales. Por supuesto, hay ejemplos en los que los colores naturales demuestran una pobre estabilidad, como la cúrcuma que no resiste bien a la luz. Es por ello por lo que se debe hacer un claro análisis antes de elegir el aditivo adecuado.
El quinto y último mito dice que los colorantes de origen natural son más caros. Esta es una suposición efectiva si se comparan los aditivos naturales y los artificiales; sin embargo, si se analiza en un plano más general, en donde el color es tan importante como el sabor cuando se trata de determinar las preferencias de los consumidores, los colorantes de color de origen natural representan mayores beneficios, puesto que los consumidores preferirán sus productos en comparación con otros que utilizan aditivos artificiales.
Como hemos mencionado, los consumidores en la actualidad prefieren los productos que cuentan con aditivos naturales, por lo que es mejor para sus empresas invertir en estos productos, de manera que sus clientes se comprometerán mejor con ustedes y aumentarán sus ventas.
A diferencia de los colorantes artificiales, los naturales no provocan afectaciones a la salud, además que tienen índice alergénico mucho más bajo, por lo que prácticamente todas las personas pueden consumir los alimentos producidos con estos elementos, contrario a lo que puede suceder con algunos aditivos artificiales; además, muchos aditivos de color naturales también pueden proporcionar elementos nutritivos al cuerpo, como la riboflavina.
Por ello, en la industria de los alimentos es cada vez más común verlos. Si su empresa utiliza pigmentos artificiales, lo mejor es que cambien a los colorantes naturales que pueden encontrar con Farbe, una empresa con casi cuarenta años de experiencia y prestigio en la industria de los colorantes, pigmentos, lacas, anticorrosivos, entre otros productos químicos. Les brindamos a nuestros distribuidores y clientes directos un servicio de excelencia, integral y personalizado. Los invitamos a visitar nuestro catálogo en línea para conocer más acerca de nuestros productos o a comunicarse con nosotros vía telefónica o por correo electrónico para ventas o asesorías de parte de los mejores especialistas en el mercado.
