Elegir productos elaborados con ingredientes naturales es una tendencia cada vez más común entre los consumidores, y aunque es bien sabido que la apariencia y el color es fundamental al momento de tomar una decisión de compra, lograr “etiquetas más limpias”, constituye uno de los principales desafíos para los productores de alimentos.
Utilizar ingredientes de origen natural no solo contribuye a mejorar la percepción de los consumidores, también aportan propiedades benéficas para la salud como antioxidantes, anti inflamatorios e incluso relajantes.
La espirulina, una de las fuentes de color natural más comunes para el azul o el verde, tiene aminoácidos esenciales y es rica en calcio, niacina, potasio, magnesio, vitaminas B y hierro. El betacaroteno, un antioxidante que se encuentra en muchas verduras, se usa para crear un color rojo anaranjado, mientras que ingredientes como las algas azules, la remolacha, el matcha y la cúrcuma aportan colores brillantes y duraderos.
Sin embargo, aunque los colores naturales brindan diversas ventajas, no podemos dejar de lado los retos que surgen al sustituir los ingredientes sintéticos.
El costo, el tiempo de vida útil y la apariencia son factores que debemos tomar en cuenta, los colores naturales son más sensibles al pH y se desvanecen debido al calor durante el procesamiento y la luz; por lo tanto, los desarrolladores de productos deben elegir colores naturales que mantengan la intensidad durante el procesamiento y almacenaje.
Conocer el pH objetivo de un producto puede ayudar a establecer qué color natural mantendrá la apariencia deseada durante cada etapa del proceso.
En Farbe Naturals, somos líderes ofreciendo soluciones de color personalizadas puramente naturales, mediante diversos análisis, evaluaremos las necesidades de cada cliente con el fin de alcanzar resultados óptimos en la creación y aplicación de color.
Acércate a nosotros y con gusto te ayudaremos a encontrar el tono que estás buscando, naturalmente.
