La cereza del pastel es uno de los elementos más conocidos y exigidos por los consumidores de postres, no sólo es un ingrediente más, sino que marca la diferencia entre un pastel bien hecho y otro que no tiene mayor impacto en el mercado. Dada su importancia dentro de la preparación, en el mundo de la repostería se ha acordado que las cerezas confitadas debían destacarse en el alimento final, entre más visibles se encontraban, el pastel era más exquisito y se vendía más.
La manera más apropiada para destacarlas fue exaltar su color rojo, una tonalidad que por sí misma ya se acentúa, pero se deseaba que esa fuerza cromática fuese más notable y llamará la atención inmediatamente. La solución para esto fue emplear colorantes. Por muchos años se utilizaron compuestos artificiales que destacaban los tonos rojos, no obstante, en el mundo apareció una ola de personas que se preocupaban más por su alimentación y comenzaron a rechazar todos los productos con algún compuesto realizado en laboratorio.
Esta tendencia llegó a prácticamente todo el mundo y en el mercado comenzaron a salir los llamados productos de «etiqueta limpia», alimentos que contaban con ingredientes 100% de origen natural, desde su composición hasta los colorantes naturales. Con una generación preocupada por su salud, las cerezas confitadas comenzaron a destacar gracias a la ayuda de colorantes como el extracto de Betabel o el Carmín.
A partir de aquí, el mercado de cerezas confitadas con colorantes para alimentos de origen natural comenzaron a venderse con mayor frecuencia y generando un alto margen de ganancias por dos motivos: la existencia de la etiqueta limpia y el hecho de que se destaquen de una manera precisa las tonalidades de esta fruta, consiguiendo que en una época donde primero se come con los ojos, las cerezas del pastel encontrarán su lugar como productos con una alta tasa de ventas en los nichos de repostería y coctelería.
Importancia del colorante vegetal
En la encuesta Nielsen acerca de la percepción mundial hacia los ingredientes de alimentos de 2016, se encontró que aproximadamente el 61% de la población global rechaza cualquier producto que dentro de sus componentes cuente con colorantes artificiales; desde entonces el porcentaje ha venido en aumento y los consumidores comunes ahora son aquellos que antes de comprar un producto revisan la lista de ingredientes en busca de algún componente artificial que condicione su decisión de compra.
En América Latina ese porcentaje equivale al 56%, lo que nos indica que la tendencia a los colorantes naturales no es exclusiva de países en desarrollo, sino que pertenece a una preocupación global en dirección a los que realmente están consumiendo y cómo estos compuestos desarrollados en laboratorios podrían afectar gravemente su calidad de vida.
Colorantes naturales usados para las cerezas confitadas
Podríamos seguir brindando cifras que destacan que un color natural es mejor que uno artificial pero creemos que ha quedado bastante claro que el mercado premiará a aquellos que apuesten por tecnologías limpias y con origen en la naturaleza. En el caso de las cerezas confitadas, se ha apostado por implementar dos tipos de colorante:
Extracto de betabel
Se obtiene a través del jugo de betabel (también conocida como remolacha), tiene una tonalidad roja muy potente con tendencia al morado, lo que permite brindar colores bastante oscuros que resaltan en la preparación final. Es posible encontrarlo como líquido y polvo.
Carmín
Este colorante es más flexible y permite tonalidades más claras (rosadas) u oscuras (violeta) dependiendo de su proceso de preparación. Brinda una excelente estabilidad ante la luz y el aumento de la temperatura, lo que lo convierte en uno de los colorantes más populares del mercado. Es extraído de la cochinilla por lo que se trata de un elemento de origen animal.
Ventajas de utilizar pigmentos naturales
Uno de los beneficios directos es que su índice de ventas en repostería va a aumentar considerablemente al implementar productos de origen natural que correspondan a aquellos estándares sociales sobre una alimentación sana y adecuada para el organismo.
Además, sus pasteles destacarán muy por encima de los de la competencia ya que al emplear tonalidades naturales el cerebro las interpreta como benéficas y preferirá estos productos.
Por otra parte, es capaz de conservar sus alimentos de una manera más natural y sin forzar a la naturaleza, muchos colorantes naturales poseen protecciones autónomas contra la luz y las altas temperaturas lo que impide que la cereza confitada se estropee y no sea apta para el consumo.
Así mismo, estos compuestos naturales contienen diferentes nutrientes, vitaminas, proteínas y minerales que se implementan de forma natural al cuerpo y ayudan a que el componente de «etiqueta limpia» cobre más sentido.
Si usted desea que sus cerezas en pastelería destaquen y le ayuden a vender más sus productos, adquiera nuestros colorantes naturales rellenando el formulario que encuentra en la sección de contacto de nuestro sitio web o diríjase a Av. Javier Barros Sierra #540, Piso 5 – Torre 1, Lomas de Santa Fe, 01210, alcaldía Álvaro Obregón.