Dicen que de la vista nace el amor y la industria de alimentos es claro ejemplo de ello.
La influencia del color sobre el sabor es tal, que resulta necesario el uso de colorantes alimentarios para resaltar el tono natural o para devolver el color perdido tras un proceso industrial.
En la constante búsqueda de la tan apreciada etiqueta limpia, las grandes industrias de alimentos han comenzado a incorporar aditivos de color de origen natural a sus formulaciones, no solo por la reducción de ingredientes sintéticos, sino porque los colorantes naturales pueden aportar beneficios adicionales.
Pero ¿qué debemos tomar en cuenta al elegir colorantes de origen vegetal?
Uno de los factores más importantes a considerar cuando elegimos un colorante será el pH (potencial de hidrógeno) el cual nos indica el nivel de acidez o alcalinidad de una disolución.
Aunque el pH de un gran número de alimentos suele ser estable, es importante que los pigmentos sean resistentes a grandes rangos de pH para garantizar la conservación óptima de los productos, desde su elaboración hasta llegar al consumidor final; de modo que puedan mantenerse cuando sean mezclados con otras sustancias con diferente pH y así evitar que se altere su estructura; lo que daría como resultado variaciones en los tonos.
La precisión sobre el grado de alcalinidad o acidez de una sustancia es fundamental, ya que de ella dependen diferentes factores que harán de cada fórmula un éxito o un volver a empezar.
Es indispensable contar con materiales confiables y efectivos que nos permitan obtener colores intensos y estables.
En Farbe Naturals, contamos con los indicadores pH más usados (naranja de metilo y rojo de metilo) además de un amplio portafolio de insumos que te ayudarán a alcanzar resultados óptimos, en cualquier industria.
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Déjanos colorear tu vida, naturalmente.
